Como actúa la violencia

La violencia crea daños que pueden llegar a la muerte de uno de los integrantes de la pareja o en gran cantidad de casos a crear daños físicos permanentes. La mujer no es un ser creado para recibir puños. El problema es que la violencia es un enemigo que se instala dentro casa y vive junto a nosotros. Como un estratega militar dirige nuestras acciones como si fuéramos marionetas, encerrándonos dentro una dinámica de la cual no conseguimos escapar.

Está siempre presente en cada uno de los ciclos de la violencia. Está presente cuando crece la tensión, durante la discusión, se ve durante la lucha y durante el arrepentimiento o la depresión. Está presente en el perdón y en el sexo maravilloso que la mujer prueba luego de haber perdonado el hombre que la ha maltratado.
Toda persona de este planeta sabe cuanto placer se crea durante el sexo que se hace luego de una discusión. La intensidad del placer que se crea en una pareja donde se utiliza la violencia no es un aspecto que podemos subestimar.
Es parte de los beneficios que se crean alrededor de la violencia y que justifican los daños y el sufrimiento que caracterizan los otros momentos.

El interés de los amigos que tratan de ayudar a la pareja consiguen solo amplificar los beneficios. Mas afecto e interés recibe la mujer y mas necesidad tiene luego de la violencia. No puede y no quiere perder las atenciones de la gente a su alrededor.

Los beneficios de la víctima
Una mujer a causa de la forma de comportarse con el marido viene considerada una mierda. Lamentablemente la forma en que tratan al marido, los pedidos, lo que pretenden y todo lo que necesitan para sentirse seguras dentro casa hacen que el titulo de egoístas les encaje a la perfección.
Se entiende esto observando el comportamiento de los hombres. Cuando un hombre es soltero todos pueden ir a su casa y moverse con tranquilidad. Desde el momento en que una mujer entra en esa casa, la casa se trasforma en un campo minado.
Todo lo que los amigos del marido hacen terminará molestándola a ella y la elección mejor es la de irse a otro lado. Se trata de la elección mejor, la peor es continuar a ir a la casa de ese hombre hasta que se crea una guerra con la mujer con insultos y acusas para terminar por irse a otro lado. Con una mujer no hay chance. O los amigos se van o se va ella.

Existe un error común cuando las personas ven una pareja donde es la mujer quién mantiene al hombre. La gente piensa que los roles en ese matrimonio se invierten. Nada más equivocado. Los roles en el campo afectivo tienen que compensar la realidad donde la mujer mantiene al hombre.

El hombre debe demostrar 50 veces por día que ella es la mujer y cualquier demostración que el haga es inútil porque apenas termina de demostrarlo ella vuelve a pensar que como mujer no vale nada y que su único valor es como sostén de la familia. Es normal que ella busque que el hombre la golpee porque de esa forma ella consigue poner en claro que ella es la fémina en la pareja.

La galantería
Las reglas de la galantería son formas en que un hombre se debe comportar para acercarse a una mujer sin que ella se aterrorice. Todas las mujeres acusan a todos los hombres de no saber hacerlo, de hacerlo en la forma equivocada, en el momento equivocado o en el lugar equivocado. Las reglas de la galantería existen en una mujer solamente cuando se habla de prostitutas, cortesanas, geishas o esclavas. El comportamiento perfecto para una mujer cuando se relaciona con un hombre es solo la capacidad de no enojarse, ofenderse o sentirse insultada.

Jugar con la dinamita

Las asociaciones que se ocupan de violencia doméstica dicen que el ciclo de la violencia inicia con la acumulación de la tensión, luego llega la discusión donde las mujeres con la lengua más hábil que la del hombre tienen superioridad y mucha más facilidad de insulto contra un hombre y por causa de esta inferioridad verbal el hombre pierde el control y la agarra a golpes para no perder el control sobre la mujer.

Cuando escucho a las psicólogas utilizare esta forma infantil para describir el problema me parece ver dos borrachos hablando de política delante de dos vasos de vino. Explican en forma ridícula una dinámica sin preguntarse si la descripción que están haciendo tiene o no alguna relación con la realidad.
Exactamente como sucede con la matemática (que no funciona en este universo) ellos describen una fórmula que funciona solo en teoría porque no explica y no describe lo que sucede en la práctica.
Dentro una relación de violencia el hombre no tiene nunca el control sobre la mujer. Jamás. Ni el control sobre la mujer, como tampoco el control sobre si mismo. La demostración de esto es que las fases de los ciclos de violencia se alternan en forma coordinada con el ciclo menstrual de la mujer. Las peleas se presentan antes de las menstruaciones. Esto es una característica presente en todas las mujeres y todo hombre casado sabe lo difícil que es soportar la agresividad de las mujeres en esos días.

Un hombre es un individuo que está directamente conectado con los ciclos solares. Esto significa ciclos anuales. Razona de una forma durante el invierno, cambia levemente en primavera y en otoño. Un hombre no tiene desequilibrios emocionales 2 veces por mes. Desde el momento que la violencia explota siempre antes de las menstruaciones es imposible que los problemas se concentren solo en los hombres. Existe una participación femenina importante.
Dentro la discusión en una pareja la mujer no tiene límites. Cuando pelea contra su hombre tiene libertad infinita para insultarlo y agredirlo de cualquier forma. Todos los insultos, insinuaciones y provocaciones pueden ser usados, en privado o en publico. Nadie acusará nunca a esa mujer de violencia contra el hombre. Puede insultar al hombre, a su madre, a su familia y a sus propios hijos. Puede incluso pegarle o lanzarle objetos y nadie nunca la acusará por un comportamiento similar. Es mas, en los errores que esta mujer hace, lo que piensan las personas es “el no reacciona porque está en publico, seguramente es un violento, cuando vuelve a su casa la mata a golpes”.
Si un hombre le da una cachetada a la mujer viene considerada violencia y ese hombre puede terminar en la cárcel por ello.

Este es el motivo por el cual la mujer cuando pelea contra su hombre pierde el control de lo que dice o hace. Se encuentra dentro un mundo donde el único que arriesga es él.

Ella puede recibir puños y golpes pero él puede perder todo lo que tiene e incluso terminar preso. 




Este es un sitio informativo
Ante cualquier duda consulte a su médico, no me responsabilizo por eventuales daños provocados por la utilización de este sistema o sistemas derivados.

Nessun commento:

Posta un commento